"No estamos solos en el mundo ... nuestros actos o fracasos a la hora de actuar están unidos por un millar de hebras, hacia adelante y hacia atrás, con el organismo de la sociedad en que vivimos" Hans Litten, 1925
martes, 31 de diciembre de 2013
Fracaso - Rafael Cadenas
Tomado de prodavinci.com
Disfrútenlo
http://prodavinci.com/2013/12/24/artes/un-regalo-de-prodavinci-para-sus-lectores-rafael-cadenas-en-lecturasprodavinci/
Fracaso Rafael Cadenas Prodavinci
domingo, 6 de octubre de 2013
Profeta Habacuc
01 Oráculo que el profeta Habacuc recibió en una visión. 02 ¿Hasta cuándo, Señor, pediré auxilio sin que tú escuches, clamaré hacia ti: «¡Violencia», sin que tú salves? 03 ¿Por qué me haces ver la iniquidad y te quedas mirando la opresión? No veo más que saqueo y violencia, hay contiendas y aumenta la discordia. 04 Por eso la Ley no tiene vigencia y el derecho no aparece jamás: ¡sí, el impío asedia al justo, por eso sale a luz un derecho falseado! 05 Miren a las naciones y observen, asómbrense y queden pasmados, porque en estos días realizaré una obra que si se la contaran, no la creerían. 06 Sí, yo voy a suscitar a los caldeos, ese pueblo salvaje e impetuoso, que recorre las extensiones de la tierra, para usurpar moradas ajenas. 07 ¡Es aterrador y temible: en él solo se funda su derecho y preeminencia! 08 Sus caballos son más ágiles que leopardos, más rapaces que lobos nocturnos; sus jinetes galopan, sus jinetes vienen de lejos, vuelan como el águila que se lanza sobre su presa. 09 ¡Todos llegan para la violencia con el rostro tendido hacia adelante, y amontonan cautivos como arena! 10 El se burla de los reyes, los soberanos son un juguete para él, juega con las ciudades fortificadas, levanta un terraplén y las conquista. 11 Entonces, cambia el viento y sigue adelante... ¡El hace de la fuerza su dios! 12 ¿No eres tú, Señor, desde los tiempos antiguos, mi Dios, mi Santo, que no muere jamás? Tú, Señor, pusiste a ese pueblo para hacer justicia, tú, mi Roca, lo estableciste para castigar. 13 Tus ojos son demasiado puros para mirar el mal y no puedes contemplar la opresión. ¿Por qué, entonces, contemplas a los traidores y callas cuando el impío devora a uno más que él? 14 ¡Tú tratas a los hombres como a los peces del mar, como a reptiles, que no tienen jefe! 15 ¡El los pesca a todos con el anzuelo, los barre y los recoge con sus redes! Por eso se alegra y se regocija, 16 y ofrece sacrificios e incienso a sus redes, porque gracias a ellas su porción es abundantes y sus manjares, suculentos. 17 ¿Vaciará sus redes sin cesar, masacrando a los pueblos sin compasión?
01 Me pondré en mi puesto de guardia y me apostaré sobre el muro; vigilaré para ver qué me dice el Señor, y qué responde a mi reproche. 02 El Señor me respondió y dijo: Escribe la visión, grábala sobre unas tablas para que se la pueda leer de corrido. 03 Porque la visión aguarda el momento fijado, ansía llegar a término y no fallará; si parece que se demora, espérala, porque vendrá seguramente, y no tardará. 04 El que no tiene el alma recta, sucumbirá, pero el justo vivirá por su fidelidad. 05 ¡Ciertamente, la riqueza es traidora, y el hombre presuntuoso no subsistirá, el que dilata su garganta como el Abismo y es insaciable como la Muerte, el que reúne para sí a todas las naciones y acapara para él a todos los pueblos! 06 ¿No entonarán todos estos contra él sátiras, sarcasmos y enigmas? Ellos dirán: ¡Ay del que acumula lo que no le pertenece ?¿hasta cuándo?? y se carga de objeto prendados! 07 ¿No se levantarán de repente tus acreedores, y no se despertarán tus expoliadores? ¡Tú serás una buena presa para ellos! 08 Por haber despojado a numerosas naciones, lo que resta de esos pueblos te despojará a ti, a causa de la sangre humana derramada y de la violencia contra el país, contra la ciudad y todos sus habitantes. 09 ¡Ay del que acumula para su casa ganancias deshonestas, a fin de establecer en lo alto su nido y escapar a los golpes de la desgracia! 10 Hiciste un proyecto vergonzoso para tu casa: al diezmar a numerosos pueblos, atentas contra tu propia vida. 11 Porque la piedra gritará desde el muro y desde el armazón le responderá la viga. 12 ¡Ay del que edifica una ciudad con sangre y la funda sobre la injusticia! 13 ¿No proviene del Señor de los ejércitos que sólo para el fuego se fatiguen los pueblos y las naciones se extenúen por nada? 14 Porque la tierra se llenará del conocimiento de la gloria del Señor, como las aguas cubren el mar. 15 ¡Ay del que hace beber a su prójimo! ¡Tú derramas tu veneno hasta embriagarlo, para contemplar su desnudez! 16 Te has saciado de ignominia, no de gloria; ¡bebe tú también y muestra tu prepucio! El cáliz de la mano del Señor se volverá sobre ti, y tu gloria se convertirá en ignominia. 17 Porque la violencia hecha al Líbano te cubrirá y la matanza de los animales te aterrará, a causa de la sangre humana derramada y de la violencia contra el país, contra la ciudad y todos sus habitantes. 18 ¿De qué sirve una imagen esculpida, para que el artista la talle, o una imagen de metal fundido, un oráculo falso, para que el artista ponga su confianza en ella, fabricando ídolos mudos? 19 ¡Ay del que dice al madero: «Despierta», y a la piedra muda: «Levántate»! ¿Puede eso pronunciar un oráculo? ¡Sin duda, está recubierto de oro y plata, pero no hay soplo de vida en su interior!
domingo, 28 de julio de 2013
Cuarta Razón para creer en Dios (Emeterio Gómez)
Habíamos desarrollado, hace algunas semanas, los tres primeros artículos de una secuencia, Cinco Razones para Creer en Dios, que interrumpimos por la presión de temas un poco más urgentes. Retomemos entonces aquella secuencia, reforcemos aquellas primeras tres razones, que a continuación resumimos muy apretadamente: 1) La Hiperinfinitud del Universo en cuanto al Espacio atañe; 2) Ídem, en cuanto al Tiempo atañe; y, finalmente 3) la Hiperinfinitud del Espíritu. La cuarta es la posibilidad cierta de imponerle valores morales a nuestro Espíritu. Porque no es, como tendemos a pensar o como se nos ha hecho creer, que "tenemos" valores, casi de la misma forma que decimos que "tenemos un hígado o una vesícula". Ni es tampoco que esos Valores, desde una instancia externa a nosotros -la Religión, las Iglesias, la Cultura, la Sociedad o la Tradición- se nos imponen. Nuestra Dimensión Ética no "está" en absolutamente ninguna parte, la Creamos nosotros cuando decidimos imponernos esos valores. Tampoco es que "nos nace" respetar a los demás, ser honestos, piadosos o solidarios, como si nosotros fuésemos un terreno fértil en el que "nacen" cosas.
El Espíritu -como Expresión de Dios- es más bien un ente radicalmente misterioso, absolutamente inefable, en el que nosotros podemos Crear y depositar el Bien, la Piedad o la Honestidad. Porque a diferencia del cuerpo, en el que todo está dado, en el Alma no hay de antemano ninguna realidad. Nada más disímil de nuestro Cuerpo que nuestro Espíritu. Nada más ingenuo que creer que nuestros Valores nos vienen "De lo más profundo de nuestro Ser". O que la Ética se ubica en la "Naturaleza más insondable de dicho Ser". En el Cuerpo hay órganos, vísceras, glándulas y lóbulos cerebrales... en el Espíritu, en cambio, no hay absolutamente nada. Él es, única y exclusivamente, "Una Pura Posibilidad de Ser". De allí, dicho sea de paso, uno de los errores más graves y desorientadores, que afectan las raíces más hondas de la Filosofía y de la Civilización Occidental: la pretensión de aplicarle al Espíritu o al Alma, las mismas Categorías, los mismos Conceptos y la misma Lógica que le aplicamos a la comprensión del Cuerpo. Y hablamos entonces del "Ser" Humano, con la misma "Naturalidad" que hablamos del Ser de un alacrán, una selva o un bombillo.
Es la Creencia, tan profunda como lamentable, según la cual el Espíritu tiene una "Manera de Ser" definida ¡¡y cognoscible!! O, peor aún, es la Creencia según la cual es deseable y superior el tener una personalidad definida y predecible... ¡¡para que todo el mundo sepa a qué atenerse con nosotros!! Cuando lo realmente fascinante es que podemos vivir de manera permanente luchando para imponerle a nuestro Espíritu esos sentimientos nobles y hermosos que le dan a la vida un nivel superior. Esa condición maravillosa ¡¡que no tiene absolutamente nada que ver con la Naturaleza!! Que no tiene ningún Ser, sino que puede "ser" -dentro de ciertos límites- lo que se proponga ser. Esa posibilidad de superarnos, de elevar nuestros sentimientos más nobles, de llegar a sentir que de verdad podemos Amar al Prójimo, que este sentimiento no es nada natural, sino que es, precisamente, la manifestación más contunden- te de la Noción de Dios. El descubrir que Éste tampoco es ninguna entidad sobrenatural en la que tengamos que creer a ciegas, o "para poder salvarnos", sino que Él es una realidad tan palpable como una montaña o un camino. Que Dios es, simplemente, la posibilidad de sentirnos Uno con la Hiperinfinitud del Universo, tanto en el espacio como en el tiempo.
Emeterio Gómez - El Universal - 28/07/2013
El Espíritu -como Expresión de Dios- es más bien un ente radicalmente misterioso, absolutamente inefable, en el que nosotros podemos Crear y depositar el Bien, la Piedad o la Honestidad. Porque a diferencia del cuerpo, en el que todo está dado, en el Alma no hay de antemano ninguna realidad. Nada más disímil de nuestro Cuerpo que nuestro Espíritu. Nada más ingenuo que creer que nuestros Valores nos vienen "De lo más profundo de nuestro Ser". O que la Ética se ubica en la "Naturaleza más insondable de dicho Ser". En el Cuerpo hay órganos, vísceras, glándulas y lóbulos cerebrales... en el Espíritu, en cambio, no hay absolutamente nada. Él es, única y exclusivamente, "Una Pura Posibilidad de Ser". De allí, dicho sea de paso, uno de los errores más graves y desorientadores, que afectan las raíces más hondas de la Filosofía y de la Civilización Occidental: la pretensión de aplicarle al Espíritu o al Alma, las mismas Categorías, los mismos Conceptos y la misma Lógica que le aplicamos a la comprensión del Cuerpo. Y hablamos entonces del "Ser" Humano, con la misma "Naturalidad" que hablamos del Ser de un alacrán, una selva o un bombillo.
Es la Creencia, tan profunda como lamentable, según la cual el Espíritu tiene una "Manera de Ser" definida ¡¡y cognoscible!! O, peor aún, es la Creencia según la cual es deseable y superior el tener una personalidad definida y predecible... ¡¡para que todo el mundo sepa a qué atenerse con nosotros!! Cuando lo realmente fascinante es que podemos vivir de manera permanente luchando para imponerle a nuestro Espíritu esos sentimientos nobles y hermosos que le dan a la vida un nivel superior. Esa condición maravillosa ¡¡que no tiene absolutamente nada que ver con la Naturaleza!! Que no tiene ningún Ser, sino que puede "ser" -dentro de ciertos límites- lo que se proponga ser. Esa posibilidad de superarnos, de elevar nuestros sentimientos más nobles, de llegar a sentir que de verdad podemos Amar al Prójimo, que este sentimiento no es nada natural, sino que es, precisamente, la manifestación más contunden- te de la Noción de Dios. El descubrir que Éste tampoco es ninguna entidad sobrenatural en la que tengamos que creer a ciegas, o "para poder salvarnos", sino que Él es una realidad tan palpable como una montaña o un camino. Que Dios es, simplemente, la posibilidad de sentirnos Uno con la Hiperinfinitud del Universo, tanto en el espacio como en el tiempo.
Emeterio Gómez - El Universal - 28/07/2013
domingo, 30 de junio de 2013
"...El que esté libre de pecado que lance la primera piedra..."
...Conserven, pues, la libertad, y no se sometan de nuevo al yugo de la esclavitud . Su vocación, hermanos, es la libertad. Pero cuiden de no tomarla como pretexto para satisfacer su egoísmo; antes bien, háganse servidores los unos de los otros por amor. Porque toda la ley se resume en un solo precepto: amarás a tu prójimo como a ti mismo. Pues si ustedes se muerden y devoran mutuamente, acabarán por destruirse...
... la libertad de expresión lleva consigo cierta libertad para escuchar...
Retomo mis publicaciones..., un momento para pensar. A la luz de algunas lecturas, de eventos, de enseñanzas, de experiencias, no quería seguir escribiendo. Solo quiero rezar, pensar.
Pero quisiera hablara acerca de las explosiones de masas en todo el mundo. Repentinamente ahora todos
se quejan, exigen, reclaman, enfrentan, etc. Turquía, Brasil, Egipto, España, etc.
Y aunque muchas de las reivindicaciones son justas y parecen tener la simpatía de todos, las razones que las originan se vienen desarrollando por décadas.
Y aunque muchas de las reivindicaciones son justas y parecen tener la simpatía de todos, las personas que
pudieran haberlas originado, son representantes de los pueblos, vienen de las mismas entrañas de aquellos
que se quejan.
Y aunque muchas de las reivindicaciones son justas y parecen tener la simpatía de todos, las exigencias
contra representantes y gobiernos no son cumplidas por aquellos en masas.
Y aunque muchas de las reivindicaciones son justas y parecen tener la simpatía de todos, seguimos el "sistema". Desde que nacemos entramos en él, y vamos actualizando nuestros objetivos de acuerdo y para él.
Y aunque muchas de las reivindicaciones son justas y parecen tener la simpatía de todos, exigimos pero no
hemos entregado nada.
Es cierto que existen corruptos, es cierto que este mundo vive más del "circo" y el "show", es cierto que las de-
sigualdades son notables.
Pero no era así desde que tenemos memoria (por no citar historia).
Pero no somos nosotros corruptos al usar papelería de la empresa.
Pero no somos corruptos al pasar más gastos de los cometidos para ser reembolsados en nuestras empresas. Pero no somos corruptos tratando de pagar 8 cervezas, aún cuando tomamos 10.
Pero no somos corruptos lanzando basura donde nos da la gana.
Pero no somos corruptos aprovechando la vida en un condominio cuando no hemos pagado nuestra parte.
Pero no somos corruptos dejando nuestro cargador de celular conectado aún cuando allí no está el celular cargándose.
Pero no somos corruptos ignorando aquel que necesita ayuda por hambre o sin hogar.
Pero no somos parte del "sistema maligno" añorando trabajar en transnacionales que acaban el planeta.
Pero no somos parte del "sistema maligno" si admiramos aquellos que nos llevaron a un desastre financiero.
Pero no somos parte del "sistema maligno" si no damos a nuestro hijos la información necesaria para que decidan y no solo parte de nuestros deseos y sueños.
No quiero que se me malintrerprete: tenemos el derecho de exigir, pero no olvidemos nuestros deberes.
Varias veces he citado a San Francisco de Asís, pero quiero recordarlo otra vez: lo mejor que podemos hacer por nosotros, por nuestra relación con Dios y por nuestra relación con el resto es ser buen padre, tío, trabajador, hijo, tía, amigo, etc.
Arriba dejé como siempre palabras de aquellos que son referencia en nuestras vidas y tienen, por supuesto, mejor forma de hacer sus ideas que yo.
El primero de los casos se trata de San Pablo en su carta a los Gálatas.
El segundo es Bob Marley.
... la libertad de expresión lleva consigo cierta libertad para escuchar...
Retomo mis publicaciones..., un momento para pensar. A la luz de algunas lecturas, de eventos, de enseñanzas, de experiencias, no quería seguir escribiendo. Solo quiero rezar, pensar.
Pero quisiera hablara acerca de las explosiones de masas en todo el mundo. Repentinamente ahora todos
se quejan, exigen, reclaman, enfrentan, etc. Turquía, Brasil, Egipto, España, etc.
Y aunque muchas de las reivindicaciones son justas y parecen tener la simpatía de todos, las razones que las originan se vienen desarrollando por décadas.
Y aunque muchas de las reivindicaciones son justas y parecen tener la simpatía de todos, las personas que
pudieran haberlas originado, son representantes de los pueblos, vienen de las mismas entrañas de aquellos
que se quejan.
Y aunque muchas de las reivindicaciones son justas y parecen tener la simpatía de todos, las exigencias
contra representantes y gobiernos no son cumplidas por aquellos en masas.
Y aunque muchas de las reivindicaciones son justas y parecen tener la simpatía de todos, seguimos el "sistema". Desde que nacemos entramos en él, y vamos actualizando nuestros objetivos de acuerdo y para él.
Y aunque muchas de las reivindicaciones son justas y parecen tener la simpatía de todos, exigimos pero no
hemos entregado nada.
Es cierto que existen corruptos, es cierto que este mundo vive más del "circo" y el "show", es cierto que las de-
sigualdades son notables.
Pero no era así desde que tenemos memoria (por no citar historia).
Pero no somos nosotros corruptos al usar papelería de la empresa.
Pero no somos corruptos al pasar más gastos de los cometidos para ser reembolsados en nuestras empresas. Pero no somos corruptos tratando de pagar 8 cervezas, aún cuando tomamos 10.
Pero no somos corruptos lanzando basura donde nos da la gana.
Pero no somos corruptos aprovechando la vida en un condominio cuando no hemos pagado nuestra parte.
Pero no somos corruptos dejando nuestro cargador de celular conectado aún cuando allí no está el celular cargándose.
Pero no somos corruptos ignorando aquel que necesita ayuda por hambre o sin hogar.
Pero no somos parte del "sistema maligno" añorando trabajar en transnacionales que acaban el planeta.
Pero no somos parte del "sistema maligno" si admiramos aquellos que nos llevaron a un desastre financiero.
Pero no somos parte del "sistema maligno" si no damos a nuestro hijos la información necesaria para que decidan y no solo parte de nuestros deseos y sueños.
No quiero que se me malintrerprete: tenemos el derecho de exigir, pero no olvidemos nuestros deberes.
Varias veces he citado a San Francisco de Asís, pero quiero recordarlo otra vez: lo mejor que podemos hacer por nosotros, por nuestra relación con Dios y por nuestra relación con el resto es ser buen padre, tío, trabajador, hijo, tía, amigo, etc.
Arriba dejé como siempre palabras de aquellos que son referencia en nuestras vidas y tienen, por supuesto, mejor forma de hacer sus ideas que yo.
El primero de los casos se trata de San Pablo en su carta a los Gálatas.
El segundo es Bob Marley.
domingo, 31 de marzo de 2013
Our Lady of Emmitsburg
Our Lady's Message of March 25, 1999
through Gianna Talone SullivanMessage 236
It's such a joy to be a mother.
I take you all, little children, into My motherly arms and embrace you with God's love and mercy.
This is a time when moral values and purity are not topics of importance in the lives of many parents.
Yet if parents do not teach the children in ways of love and purity, who will set the stage which will mold their future for the rest of their lives?
When children are developing, knowledge is infused into them through the interaction of their mothers and fathers.
They can be exposed to love and gentleness or brokenness and pain.
They begin to understand the meaning of acceptance, rejection and indifference.
They become independent and begin to choose good values or bad values.
It is essential to make a conscious effort to repeatedly lay the foundation for good moral values, values which involve purity, obedience to God's word, honesty, respect for others, respect for life and the essence of dignity.
Violence teaches children to be violent.
Patience, forgiveness and love teaches children to be patient, forgiving and loving.
Children are faced with demoralizing circumstances at such an exponential rate that is affecting their spiritual, mental and physical state.
Join Me, little ones, in being good stewards of God's love.
I love you all and take your petitions this night.
I thank God for allowing Me to be with you in this way.
Peace to you.
Thank you for responding to My call.
AD DEUM.
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